En 2003, los ingresos netos per cápita de los campesinos en los suburbios de Beijing ascendieron a 6.496 yuanes, con un aumento de 616 yuanes frente al a?o anterior, y descontados factores de precios, el incremento real fue de 11,5%, o sea, 0,3 puntos porcentuales más que la velocidad de crecimiento registrada en los ingresos los residentes urbanos.

Los ingresos de campesinos consiguieron sus ingresos principalmente de las siguientes fuentes: Los ingresos productivos fueron de 5.521 yuanes, con un crecimiento del 7,6%. De ese total, 3.909 yuanes corresponden a los sueldos, un 6,5% más, y 1.621 yuanes a los derivados de la gestión familiar, un 10,6% más. Los ingresos no productivos sumaron 975 yuanes, con un aumento del 30%. Este monto incluye 610 yuanes generados de la compensación de la expropiación del suelo y la demolición y reubicación de la casa, un 30,9% más, y 365 yuanes provenientes de donaciones de parientes y de las pensiones de jubilación y de vejez, un 28,6% más. La tasa de contribución del trabajo de producción al incremento de los ingresos llega al 63,5%, muy por encima de la tasa de contribución de las labores no productivas. En los últimos a?os los ingresos en concepto de propiedad generados por el alquiler de vivienda o la compensación de demolición y reubicación se han elevado con gran velocidad, lo que promueve anualmente dos puntos porcentuales más a los ingresos de los campesinos. La tasa de contribución al aumento de sus ingresos per cápita llegó 38,5%, la de los ingresos de gestión familiar a 25% y la de las labores no productivas a 36,5%. Entre los ingresos per cápita derivados del trabajo de producción, 4.831 yuanes correspondieron a las industrias secundarias y terciarias, es decir, un crecimiento de 375 yuanes o 8,4%, cuyo peso específico sobre los ingresos productivos se elevó de 86,9% en 2002 a 87,5% en 2003; los ingresos provenientes de la industria primaria alcanzaron 690 yuanes, para un incremento de 2,3%. Los ingresos per cápita obtenidos de las labores no productivas llegaron a 975 yuanes, un 30% más que el a?o 2002.

Al mismo tiempo de la mejora del nivel integral de los ingresos, la estructura de la renta de los campesinos ha cambiado considerablemente. Las familias de bajos ingresos (2.000 yuanes anuales per cápita) fueron del 3,7%, con una reducción de 4,1 puntos porcentuales en comparación con el a?o anterior; las familias con un ingreso de 2.000 a 3.000 yuanes representaron el 18,7%, con una disminución de 1,7 puntos porcentuales; las con un ingreso de 3.500 a 5.000 yuanes se mantuvieron iguales que el a?o previo; las con un ingreso de 5.000 a 8.000 yuanes ocuparon el 31%, para un aumento de 1,2 puntos porcentuales; las con un ingreso de 8.000 a 10.000 yuanes implicaron el 10,3%, con una ascensión de 1,6 puntos porcentuales; y las familias holgadas con un ingreso anual per cápita de más de 10.000 yuanes alcanzaron el 15,8%, o 3,4 puntos porcentuales más. Calculando sobre esta base, en las zonas rurales 207.000 familias con 507.000 personas habían vivido una vida acomodada, lo que significó una subida de 48.000 familias con 113.000 personas sobre el a?o 2002; 48.000 familias con 141.000 personas pertenecían a grupos de ingresos bajos, cifra que implicó una reducción de 51.000 familias con 167.000 personas.

El crecimiento de la renta rural impulsó las demandas de consumo de los campesinos y su calidad de vida mejoró obviamente. En 2003, los gastos de consumo de vida por persona sumaron 4.655 yuanes, registrando un aumento de 10,7% frente al a?o anterior, y descontando los factores de precios, el incremento real fue de 11,7%. De ese total, los gastos per cápita de los alimentos llegaron a 1.476 yuanes, con una ascensión de 6,4% en comparación con 2002, mientras que el coeficiente Engel bajó de 33% a 31,7%; los gastos de los artículos no alimentarios alcanzaron 3.179 yuanes, o un 12,8% más. Teniendo en cuenta la estructura de los gastos para el consumo de vida en 8 campos principales, los de transporte y telecomunicaciones se elevaron con mayor medida, es decir, un 32,5% más, seguidos por los de viviendas, un aumento de 29%, y los de cultura, educación y recreación, así como de servicios, que registraron un incremento de 16.3%.

(09/03/2004, CIIC)